La colorida tumba real de un escriba Egipcio de hace 3.200 años [FOTOS]

En la necrópolis de Tebas, cerca de Luxor (Egipto), arqueólogos japoneses hallaron la tumba de un escriba real. Los investigadores calculan que la cripta es del año 1200 A.C. aproximadamente –fecha que coincide con la época del Imperio Nuevo. La Universidad de Waseda informó del hallazgo en un comunicado de prensa.
Egipto alcanzó su máximo esplendor durante el periodo del Imperio Nuevo (1550-1077 A.C.). En ese entonces, el país fue gobernado por los faraones Tutmosis III, Akenatón, Ramsés II y Tutankamón. Tutmosis III (1479-1425 A.C.), conocido como el “Napoleón de Egipto”, construyó un imperio que se extendió desde el Éufrates hasta Nubia (el actual Sudán). Ramsés II (1279-1213 A.C.) es famoso por sus campañas agresivas y la construcción de enormes templos y monumentos. Para el entierro de los faraones, su familia y los miembros de la nobleza en la época del Imperio Nuevo, se utilizó la necrópolis de Tebas, ubicada en la orilla occidental del Nilo, frente a la antigua capital de Egipto.
Barco del dios-sol Ra, adorado por los monos babuinos.
Los arqueólogos descubrieron la tumba del escriba real mientras exploraban la cripta del máximo oficial del faraón Amenofis III. El sepulcro en forma de T se encuentra orientado hacia el eje este-oeste y está conformado por dos habitaciones: el cuarto principal, con 4.6 m de largo, y un hall transversal de 5.5 m. Hasta el momento, los investigadores solo han explorado una parte de la tumba.
En una de las paredes del sepulcro, los científicos descubrieron una inscripción con el nombre y el rango de su propietario: "Hounsou, el escriba real”. El tramado del friso debajo del techo fue hecho con el estilo característico del reinado de los faraones de las dinastías XIX y XX (1292-1077 A.C.). Asimismo, los investigadores descubrieron un mural con imágenes del dios Osiris, la diosa Isis y una oda a Hounsou y su esposa. En otra pared se conservó un bajorrelieve con la representación del barco del dios-sol Ra, adorado por cuatro babuinos. En el antiguo Egipto, estos monos eran considerados como animales sagrados y compañeros de Tot, dios de la sabiduría y la magia, e inventor de la escritura. La inscripción al lado del bajorrelieve llamaba a Hounsou: “el escriba verdaderamente conocido”.
Hounsou, el escriba real, y su esposa, adorando a Osiris e Isis.
En la próxima temporada de trabajo de campo, los arqueólogos planean terminar de limpiar los escombros y continuar con el estudio del sepulcro. Anteriormente, los investigadores descubrieron, en un lugar no muy lejos de Asuán, una necrópolis del tiempo del Imperio Nuevo que contenía cuarenta tumbas de las dinastías XVIII y XIX. En una de las tumbas, los arqueólogos encontraron un anillo con el sello grabado del faraón Tutmosis III.
Ubicación geográfica de la tumba de Hounsou, en Luxor, Egipto
Katerina Rusakova
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