Urano: captan auroras masivas en su atmósfera

Esta es una imagen compuesta de Urano, una corresponde a su anillo y la otra a las auroras (Foto: ESA / Hubble y NASA, L. Lamy / Observatorio de París).

El telescopio Hubble, capaz de captar imágenes a 10 a 15 mil millones de años luz, acaba de captar por primera vez auroras en Urano, ubicado a 2.600 km de la Tierra.

El séptimo planeta desde el Sol fue captado en una imagen compuesta por el Voyager 2 de la NASA, la sonda más alejada de la Tierra a más de 17.000 km de nuestro planeta, y dos observaciones diferentes hechas por Hubble, una de su anillo y otra de sus auroras.

Voyager 2 transmite imágenes del cosmos desde fines de los 70s, cuando fue lanzada, y entre los fenómenos que registró en todo este tiempo se cuentan las auroras de otros planetas.

Estas también se dan en la Tierra. Ocurren cuando corrientes de partículas cargadas eléctricamente llegan en ráfagas de vientos solares y de la ionósfera planetaria. Estas partículas se ven encerradas por campos magnéticos planetarios y luego son lanzadas hacia la atmósfera superior, donde al combinarse con gases como el oxígeno o el nitrógeno generan fosforescencias en paredes de luces.

Júpiter y Saturno ya habían mostrado a la ciencia los colores de sus auroras a la ciencia, gracias a Voyager 2, además. Urano estaba en la lista de pendientes para saber un poco más sobre cómo se dan las auroras en su atmósfera. Ya en 2011, Hubble capturó una imagen de las mismas en el gigante helado y en 2012 y 2014 un equipo liderado por un astrónomo del Observatorio de París las examinó utilizando las capacidades ultravioletas del Espectrógrafo de Imágenes de Telescopio Espacial (STIS) del telescopio.

Fueron dos ráfagas de viento solar masivas las que se dieron cita en Urano, causando la aurora captadas por el Hubble, las más intensas jamás vistas en el planeta según la NASA. Al observar las auroras se evidenció que viajan por el planeta y giran con este, lo que permitió revelar la posición de los polos magnéticos de Urano, descubiertos hace casi 30 años por el Voyager 2 y desaparecidos desde entonces a las observaciones científicas.

Hans Huerto
Si te gustó esta noticia, entérate de más a través de nuestros canales de Facebook y Twitter.

 

Suscríbete

Déjanos tu mail para recibir nuestro boletín de noticias

La confirmación ha sido enviada a tu correo.