Trump retira a EE.UU. del Acuerdo de París: ¿Qué implica para el mundo?

(Foto: Gage Skidmore/Flickr)
El Acuerdo de París, suscrito por casi 200 países en 2015, es un acuerdo multinacional no vinculante a favor de la implementación de políticas para revertir el cambio climático y combatir sus consecuencias en las poblaciones del mundo. Esta mañana, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado que su país, el segundo emisor de gases de efecto invernadero en todo el planeta, se retira del convenio.
"Para cumplir con mi deber solemne de proteger a Estados Unidos y a sus ciudadanos, Estados Unidos se retirará del acuerdo climático de París, pero iniciará negociaciones para volver a entrar en el acuerdo de París o en una transacción completamente nueva en condiciones que sean justas para los Estados Unidos", dijo Trump. "Estamos saliendo. Pero comenzaremos a negociar, y veremos si podemos hacer un trato justo. Y si podemos, genial”.
No obstante, horas después de su declaración, y mediante una manifestación conjunta, Francia, Alemania e Italia han lamentado la decisión del presidente y rechazaron su sugerencia de que el pacto mundial podría ser revisado.
El factor económico detrás de la decisión
Así, Estados Unidos suspende de inmediato "toda aplicación del no vinculante acuerdo de París" y sus regulaciones "financieras draconianas". Para Trump, la economía de Estados Unidos sufriría pérdidas de ingresos y empleos si se implementa el pacto, citando un estudio -discutido vigorosamente por grupos ambientalistas- que afirma que el acuerdo costaría 2,7 millones de puestos de trabajo en 2025. Ello, pese a que el mercado de la energía renovable y limpia alcanzó un valor de US$1,4 billones el año pasado, con US$200.000 millones tan solo en los Estados Unidos.
Además, el acuerdo también consideraba la urgencia de que los países desarrollados aportaran un total de US$100.000 millones anuales para ayudar a las naciones en vías de desarrollo a mejorar sus industrias y reducir así sus emisiones. Trump quiere así deshacer el pedido hecho por su antecesor, Barack Obama, para que EE.UU. aporte 3 mil millones de ese fondo. A la fecha, el país ya donó US$1.000 millones. Trump ya ha emprendido recortes presupuestales a programas científicos y ambientales desde el inicio de su gestión, a fin de contar con recursos que le permitan, asegura, reactivar la economía de su país.
Principal contaminante histórico
La salida de Estados Unidos, aunque no compromete la implementación del acuerdo en otros países, sin duda es un golpe a la voluntad política global por reducir las emisiones de dióxido de carbono. Tan solo en 2016, China fue el principal emisor de estos gases, con 28,21% del total global, pero Estados Unidos con casi 16% se ubicó segundo en la tabla, seguido de lejos por la India, con 6,24%. No obstante, de acuerdo con un análisis histórico —que va desde el inicio de la Era Industrial, a mediados del siglo XIX, hasta 2014— realizado por el Centro de Análisis de Información de Dióxido de Carbono, los Estados Unidos es el principal emisor de dióxido de carbono, a la luz de que los picos alcanzados por China que superan los índices de EE.UU., se registran recién a inicios del siglo XXI.
El Acuerdo de París proponía reducir las emisiones globales a 56 gigatoneladas en 2030, pues si el mundo continúa contaminando como de costumbre la cifra alcanzaría las 69 gigatoneladas para ese año. La meta con ello era lograr que la temperatura global para aquel entonces no haya aumentado en más de 2°C, objetivo que se complica con la salida de uno de los grandes contaminantes como Estados Unidos, que además tiene en su economía a una de las más dinámicas y grandes del globo.
Mientras el liderazgo mundial en temas ambientales deja su trono vacío con el gesto de Trump, China y la India, con grandes industrias contaminantes, se alzan como figuras que podrían tomar la posta y se los próximos referentes en el tema en años venideros. De acuerdo con análisis de Climate Action Tracker, un cluster de think tanks europeos sobre el cambio climático, los objetivos del Acuerdo de París para estos países serán prontamente alcanzados por ellos sin mayor problema. Y sin importar las decisiones de Trump.
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