Del iPhone X al iPhone XS: ¿vale la pena adquirir el último modelo?

Apple
Hace unos días Apple presentó a sus nuevos teléfonos móviles: el iPhone XS, XS MAX y XR. La pregunta que siempre asalta a los amantes de la manzana mordida es ¿vale la pena cambiar mi iPhone por uno nuevo? En la siguiente lista esta pregunta tratará de ser respondida, analizando la evolución directa: del iPhone X al iPhone XS.
Diseño
Apple
En este apartado no hay cambio alguno. Ambos equipos tienen un marco de acero que rodea todo su cuerpo y ambas caras están cubiertas de cristal. Además podremos ver el clásico notch en la parte superior de la pantalla. Al lado opuesto del teléfono podemos ver la cámara doble que sigue estando en posición vertical.
La única mejora aparente se encuentra en su resistencia al agua; el iPhone XS cuenta con un certificado IP68, a diferencia del iPhone X que tenía el IP67. Esto quiere decir que el nuevo teléfono puede sumergirse hasta 2 metros mientras que el anterior solo podía hasta 1 metro.
Pantalla
Apple
Aquí podemos mencionar que ambos dispositivos, tanto el iPhone X como el XS cuentan con una pantalla OLED de 5,8 pulgadas y una resolución Super Retina HD de 2.436 x 1.125 píxeles.
En relación a las características, todas se mantienen. Ambos sistemas cuentan con la tecnología True Tone y el sistema 3D Touch.
Cámara
Apple
Apple no suele tomarse demasiado en serio los grandes cambios cuando se trata de las versiones S y este año no ha sido la excepción. Si analizamos las cámaras del iPhone X y el iPhone XS ambas son exactamente iguales. Aquí podremos encontrar un doble sensor de 12 + 2 megapíxeles con una apertura de f/1,8 para el sensor principal y una de f/2,4 para el secundario.
La mejora viene por el nuevo procesador y la incorporación de algunas imágenes. Según Apple, el sensor de la cámara del iPhone XS tiene píxeles más profundos y grandes. “Más profundos para mejorar la fidelidad de la imagen y más grandes para que el sensor capte más luz”.
En cuanto al video, el iPhone XS puede grabar videos en 4K con la cámara trasera y hasta 1080p con la delantera. Ambas pueden llegar a grabar hasta en 60 fps.
Procesador
Apple
Hasta ahora no parece haber un gran cambio en relación a ambos equipos. Sin embargo, Apple trae para el iPhone XS el A12 Bionic, “el chip más inteligente y potente en un smartphone”.
A diferencia del iPhone X que cuenta con un A11 Bionic, este nuevo procesador es fabricado en 7nm y promete más potencia y menos consumo. Apple indica que el A12 puede procesar hasta cinco billones de operaciones por segundo y, combinado con la nueva generación del Neural Engine, promete una clara mejora en el rendimiento del dispositivo.
El A12 cuenta con 6 núcleos: dos dedicados para alto rendimiento que se encargan de realizar las tareas de cálculo más complejas y cuatro núcleos de alta eficiencia para las tareas del día a día. Según la web de la compañía los dos núcleos prometen hasta un 15% mayor rapidez que la del A11. Y los cuatro núcleos de eficiencia son hasta un 50% más eficiente que los del A11.
En cuanto al GPU diseñado por Apple, sus cuatros núcleos también le otorgan una mejora radical al rendimiento gráfico en los juegos, edición de video y otras aplicaciones con demanda gráfica. Este rendimiento se eleva hasta en un 50% que en el A11 Bionic.
Claramente, esto no quiere decir que el A11 esté totalmente desfasado. Dentro de la oferta de teléfonos móviles al procesador del iPhone X aún le quedan varios años para seguir peleando los primeros lugares en cuanto a rendimiento.
En lo que sí hay una clara mejora es en el almacenamiento. El iPhone XS llega con capacidades de 64, 256 y 512 GB. Esta última versión no está disponible para versiones del iPhone X.
Batería
Este apartado puede ser determinante a la hora de decidir cambiarse o no de teléfono. Sin embargo, Apple aún no da detalles sobre la capacidad de sus baterías en términos de miliamperios por hora.
Lo que sí ha mostrado son datos acerca de la duración. Si con el iPhone X nos ofrecían 2.716 mAh para 21 horas de duración en llamada y 12 horas de navegación, con el iPhone XS solo durará una media hora más.
Precio
En su tiempo, el iPhone X abrió polémica en redes sociales por su precio exuberante de 1.159 euros para su versión de 64 GB. En esta oportunidad, el iPhone XS de 64 mantiene el mismo precio. La diferencia se marca para las versiones de 256 y 512 GB en donde llegan a costar 1.329 y 1.559 euros respectivamente.
Las mejoras que ha recibido el iPhone X para llegar a ser un iPhone XS no parecen ser contundentes. Más allá del procesador, todas las demás características se mantienen invariables. Por esta razón, si no deseas gastar el mismo dinero en un equipo prácticamente igual, juntar los centavos para el terminal del próximo año sería una decisión mucho más acertada.
Es importante mencionar que a pesar de todas las mejoras en este nuevo equipo, la adopción de la tecnología 5G fue la gran ausente.. Algo que ya ha hecho Motorola y que, según los rumores, hará Samsung con uno de sus próximos teléfonos Galaxy S10.
Adrian Díaz
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, tecnología que suma.
Sobre N+1: Es la primera revista online de divulgación científica y tecnológica que permite la reproducción total o parcial de sus contenidos por medios de comunicación, bloggers e influencers, realizando la mención del texto y el enlace a la web: “Esta noticia ha sido publicada originalmente en la revista N+1, tecnología que suma:www.nmas1.org”.
Novedades

La inteligencia artificial y el big data en el sector del entretenimiento
Proteja sus datos personales y comerciales a un nivel superior
La piel de oveja: un inusitado aliado anti fraude de los antiguos abogados
Cómo mejorar la seguridad en una página web
Colombia, Ecuador y Perú comparten gran parte de su biodiversidad agrícola y el dilema por el uso de las semillas nativas o transgénicas. Estas últimas están en vilo porque, a pesar de haber pasado por muchos estudios científicos, todavía hay quienes dudan de su seguridad e impacto tanto en la salud como en el medioambiente.
Transgénicos en los Andes
Países andinos Colombia, Ecuador y Perú viven una encrucijada por el uso y la normativa de los cultivos y alimentos genéticamente modificados
Suscríbete
Déjanos tu mail para recibir nuestro boletín de noticias