Científicos mexicanos desarrollan nanotecnología en Japón para expandir el acceso al espacio

Pixabay
Los mexicanos Isaí Fajardo Tapia y José Rodrigo Córdoba Alarcón desarrollan nanosatélites en el Instituto de Tecnología de Kyushu en Kitakyushu, Japón. De acuerdo con el artículo publicado en Tangible (del periódico El Universal), esta tecnología tiene el fin de crear más puertas de acceso al espacio.
Los investigadores colaboran en la misión del satélite Ten-Koh, proyecto lanzado del centro espacial de Tanegashima en octubre de 2018; en conjunto con el GOSAT-2 "IBUKI-2" de la Agencia Espacial Japonesa (JAXA). El objetivo de Ten-Koh inmediato es medir el ambiente de radiación y las características del plasma que rodea la Tierra.
En su diseño y operación trabajó un equipo de 25 personas de 13 países diferentes. El dispositivo garantiza la apertura del campo tecnológico espacial, pues la mayoría de los miembros son estudiantes de licenciatura, maestría y doctorado. Otro de los logros fue haber implementado componentes tecnológicos que no han sido creados específicamente para el uso espacial. Esto abre una oportunidad para desarrollarlos en más países.
Además, el dispositivo cuenta con tres adaptaciones secundarias. La primera es un sistema de control térmico, el segundo un ultracapacitor y la tercera un radio de ultra baja potencia.
Historia espacial
Se estima que durante la década de los setenta Estados Unidos aportaba 4% del Producto Interno Bruto (PIB) a la Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (NASA). Esta inversión abría el mundo espacial solamente a países desarrollados o grandes potencias económicas, es decir, a quienes podían solventar las costosas actividades espaciales.
En la década siguiente, la abertura del sector privado en los proyectos espaciales, el fenómeno “NewSpace”, abrió las barreras de acceso e impulsó la búsqueda de nuevos insumos y nuevos inversionistas en la industria espacial. Uno de los proyectos más ambiciosos en la materia se desarrolla en el campo de los nanosatélites, también conocidos como Cube-Sats. Pequeños satélites de alto impacto.
Estos pequeños equipos espaciales se caracterizan por tener una masa menor a 10kg, su dimensión cúbica es de 10x10x10 centímetros (1U). Y se aplican en diversas ramas, como monitoreo del clima, comunicaciones, monitoreo del territorio, actividad auroral (para medir el clima espacial), medir la radiación, en el sector educativo, en el despliegue de paneles solares, etc.
De acuerdo con nanosats.eu la compilacion de nanosatelites más extensa del mundo, la industria genera empleo en alrededor de 337 instituciones manufactureras. El coste de producción, lanzamiento y puesta en órbita de estos dispositivos es (algunas veces) menos de una milésima parte de lo que costaría por un satélite de dimensiones tradicionales.
México
Otro mexicano, el estudiante Jaime Sánchez de la Vega, es el director de la primera investigación de la NASA que inspecciona el calentamiento urbano. La falta de oportunidades y espacios para desarrollar su talento en México ha llevado a estos personajes a buscar lugares fuera del país que les permitan explorar sus capacidades.
Esto deja entre ver que al país azteca le quedan muchos puntos por desarrollar en materia de impulso y apoyo a sus estudiantes.
Yasmin Agustín
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
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