Día Mundial contra el Cáncer: docenas de medicamentos no-oncológicos pueden matar células cancerosas

Médicos descubrieron propiedades contra el cáncer en medicamentos no-oncológicos.
Foto referencial/ Pixabay
Los medicamentos para la diabetes, la inflamación, el alcoholismo, e incluso para el tratamiento de la osteoartritis en los perros, también pueden matar las células cancerosas en el laboratorio, según un estudio realizado por científicos del Broad Institute del MIT y Harvard. Los investigadores analizaron sistemáticamente miles de compuestos farmacológicos ya desarrollados y encontraron 49 medicamentos indicados para otras enfermedades con actividad anticancerígena. Los sorprendentes hallazgos también revelaron nuevos mecanismos farmacológicos que sugieren una posible forma de acelerar el desarrollo de nuevos medicamentos contra el cáncer o reutilizar los medicamentos existentes para tratarlo. El estudio fue publicado en la revista Nature Cancer.
Relevancia del estudio
Anteriormente se ha encontrado propiedades anticancerígenas en medicamentos no oncológicos, como resultado de descubrimientos fortuitos. Por esta razón, los investigadores realizaron el análisis de 4.518 medicamentos del Centro de Reutilización de Drogas probados en 578 líneas celulares de cáncer humano.
En este estudio el 77% de compuestos, (3,466) no estaban relacionados con la oncología, y los compuestos restantes eran quimioterapéuticos (2%) o agentes de oncología específicos (21%). Para detectar medicamentos que actúan contra líneas celulares, utilizaron un método de código de barras molecular conocido como PRISM. Esto permite etiquetar cada una de las líneas celulares con un código de barras de ADN y medir la tasa de supervivencia de las células cancerosas después de la acción del compuesto.
En la gráfica, se evidencia a cómo16 compuestos oncológicas y no oncológicas demostraron ser efectivos en el modelo predictivo de Pearson.
Nature Cancer, Predictive biomarker discovery using the PRISM Repurposing dataset.
Medicamentos no oncológicos identificados
Se encontró 49 medicamentos desarrollados inicialmente para reducir el colesterol o reducir la inflamación que fueron capaces de matar algunas células cancerosas. Los medicamentos no oncológicos inhibieron selectivamente subconjuntos de líneas celulares de cáncer de manera predecible a partir de las características moleculares estas células.
Históricamente, los científicos han encontrado nuevos usos para algunos medicamentos existentes. "Pensamos que tendríamos suerte si encontramos incluso un solo compuesto con propiedades anticancerígenas, pero nos sorprendió encontrar tantos", dijo Todd Golub, director científico y director del Programa de Cáncer en el Broad en un comunicado.
Hallazgos importantes
Algunas de las cuatro docenas de medicamentos que se identificaron parecen actuar no inhibiendo una proteína sino activando una proteína o estabilizando una interacción proteína-proteína. El equipo de investigadores descubrió que un número inesperadamente grande de fármacos no oncológicos estructuralmente diversos, mata las células cancerosas que expresan proteína PDE3A al estabilizar la interacción PDE3A-SLFN12. Si bien estos compuestos tienen una potencia limitada, pueden resultar útiles como puntos de partida para una mayor optimización de la química medicinal de este mecanismo anticancerígeno.
Otro hallazgo importante es la identificación de actividad anticancerígena del disulfiram y vanadio. Por ejemplo, el fármaco de dependencia al alcohol disulfiram (Antabuse), medicamento utilizado para tratamiento de la dependencia al alcohol (alcoholismo crónico), eliminó las líneas celulares que portaban mutaciones que causan el agotamiento de las proteínas de la metalotioneína. La accesibilidad del cobre en diferentes órganos y tipos de células probablemente también modula la actividad anticancerígena del disulfiram.
También los compuestos que contienen vanadio, encontrados en medicamentos para tratar la diabetes, eliminan selectivamente las células cancerosas que expresan altos niveles del transportador de sulfato SLC26A2, este hallazgo es nuevo ya que no se había sospechado previamente un vínculo de acción.
Asimismo, se encontró que la tepoxalina, el medicamento antiinflamatorio, desarrollado originalmente para su uso en personas pero aprobado para el tratamiento de la osteoartritis en perros, eliminó las células cancerosas al golpear un objetivo desconocido en las células que sobreexpresan la proteína MDR1 (proteína de resistencia a múltiples fármacos), que comúnmente impulsa la resistencia a los medicamentos de quimioterapia.
Qué se espera en el futuro
El trabajo futuro requerirá ampliar tales estudios, a ensayos clínicos en pacientes con cáncer y determinar si se pueden lograr que las concentraciones de los compuestos encontrados sean suficientemente altas para obtener efectos anticancerígenos in vivo. Sin embargo, como lo señalan los investigadores en el estudio, antes de hacerlo, es importante establecer que la actividad de tales medicamentos en ciertas concentraciones sean alcanzables y tolerables en humanos.
Los investigadores también pudieron predecir si ciertos medicamentos podrían matar cada línea celular al observar las características genómicas de la línea celular, como las mutaciones y los niveles de metilación. Esto sugiere que estas características podrían usarse algún día como biomarcadores para identificar a los pacientes que probablemente se beneficiarán de ciertos medicamentos. Este tipo de hallazgo nos acercan a la anhelada medicina personalizada.
Anteriormente hablamos en N+1 del caso de la creación de un medicamento ‘a medida’ para una sola paciente. También, reportamos sobre el caso de una vacuna personalizada para el cáncer cerebral, además de hallazgos en una vacuna contra la gripe que podría usarse como tratamiento para tumores humanos.
Tania Valbuena
Esta entrevista ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
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