Misteriosa nube de radiación se esparce por el norte de Europa

L. Zerbo / Twitter
A través de toda la semana pasada, autoridades de varios países europeos detectaron un misterioso aumento en los niveles de radiación en el norte del continente. Según reportó Reuters, hasta ahora ninguna nación se ha presentado para reclamar la responsabilidad de la anomalía.
Estaciones de monitoreo radiológico de Noruega, Finlandia y Suecia detectaron el sutil aumento de la radiación y anunciaron nuevas lecturas de partículas de radionucleidos artificiales en la atmósfera. Aun así, a pesar de ser lo suficientemente altos para ser registrados por los sensores, los niveles se consideran inofensivos para los humanos
“Se midieron niveles muy bajos de las sustancias radiactivas cesio-134, cesio-137, cobalto-60 y rutenio-103”, dijo la Autoridad de Seguridad Radiológica de Suecia en Twitter. “Los niveles medidos son tan bajos que no representan un peligro para las personas o el medio ambiente”, aclararon.
Un sospechoso
El fin de semana, el Instituto Nacional Holandés para la Salud Pública y el Medio Ambiente (RIVM) anunció que, basándose en un análisis de los datos disponibles, la “combinación de radionucleidos puede explicarse por una anomalía en los elementos combustibles de una central nuclear”.
Según la evidencia disponible, la organización sugirió que las partículas radiactivas detectadas provenían de la dirección del oeste de Rusia, pero aclaró que esto no significaba que estuvieran vinculadas definitivamente con las plantas de energía rusas.
“Algunos informes recientes de los medios afirmaron, posiblemente basado en una traducción errónea de nuestro informe original, que los radionucleidos se originaron en el oeste de Rusia", dijo RIVM en un comunicado. “La afirmación es que los radionucleidos viajaron desde la dirección del oeste de Rusia a Escandinavia, pero que no se puede señalar ningún país de origen específico en este momento”, añadió.
22 /23 June 2020, RN #IMS station SEP63 #Sweden???????? detected 3isotopes; Cs-134, Cs-137 & Ru-103 associated w/Nuclear fission @ higher[ ] than usual levels (but not harmful for human health). The possible source region in the 72h preceding detection is shown in orange on the map. pic.twitter.com/ZeGsJa21TN
— Lassina Zerbo (@SinaZerbo) June 26, 2020
De la misma opinión fue Lassina Zerbo, Secretario Ejecutivo de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares CTBTO, quién publicó un mapa de la distribución de la anomalía: la mayoría estaba dentro de Rusia, pero también incluía partes de Finlandia, Suecia, Dinamarca y Noruega.
“Es probable que estos isótopos provengan de una fuente civil”, dijo Zerbo en Twitter, sugiriendo una fuente relacionada con la producción de energía nuclear. “Podemos indicar la región probable de la fuente, pero está fuera del mandato de la CTBTO identificar el origen exacto".
La reacción
En respuesta a estas especulaciones, un portavoz de Rosenergoatom, parte de la corporación rusa de energía nuclear Rosatom, dijo que las dos centrales nucleares en la región estaban funcionando normalmente: Loviisan Voimalaitos y Leningradskaya Aes, con niveles normales de radiación.
“Ambas estaciones funcionan en régimen normal. No ha habido quejas sobre el trabajo del equipo”, dijo Rosenergoatom a la agencia de noticias TASS. “Las emisiones agregadas de todos los isótopos especificados en el período mencionado no excedieron los números de referencia. No se han reportado incidentes relacionados con la liberación de radionúclidos fuera de las estructuras de contención”.
Este evento recuerda al ocurrido a finales del 2017 cuando una nube de radiación también se esparció por Europa. En esa ocasión, aunque el gobierno ruso confirmó la detección de niveles “extremadamente altos” de radiación, negó que fuente hubiese sido una de sus plantas nucleares.
Victor Román
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
Sobre N+1: Es la primera revista online de divulgación científica y tecnológica que permite la reproducción total o parcial de sus contenidos por medios de comunicación, bloggers e influencers, realizando la mención del texto y el enlace a la web: “Esta noticia ha sido publicada originalmente en la revista N+1, ciencia que suma: www.nmas1.org”.
Novedades

La inteligencia artificial y el big data en el sector del entretenimiento
Proteja sus datos personales y comerciales a un nivel superior
La piel de oveja: un inusitado aliado anti fraude de los antiguos abogados
Cómo mejorar la seguridad en una página web
Colombia, Ecuador y Perú comparten gran parte de su biodiversidad agrícola y el dilema por el uso de las semillas nativas o transgénicas. Estas últimas están en vilo porque, a pesar de haber pasado por muchos estudios científicos, todavía hay quienes dudan de su seguridad e impacto tanto en la salud como en el medioambiente.
Transgénicos en los Andes
Países andinos Colombia, Ecuador y Perú viven una encrucijada por el uso y la normativa de los cultivos y alimentos genéticamente modificados
Suscríbete
Déjanos tu mail para recibir nuestro boletín de noticias